Ciencia, cyborgs y mujeres
Visita guiada: Soft Power. Arte, tecnologías y biopoder
:: La naturaleza como tecnología ::
Si hablamos de la intersección entre tecnología y filosofía política de finales del siglo XX, Haraway es la parada obligada. Con ella, el discurso técnico se topa con la filosofía de la ciencia. La condición de objetividad del conocimiento científico es puesta en cuestión por la noción harawayana de “conocimiento situado”: el sujeto que piensa no es un sujeto autónomo y abstracto, siempre se piensa con alguna intención y desde algún lugar. La ciencia, nos dice Haraway, no es neutral.
Haraway, además, desplaza el debate sobre el concepto de tecnología, que se convierte en un debate sobre el concepto de naturaleza. No existe por un lado la naturaleza y por otro la tecnología sino que la naturaleza es, en sí misma, un artefacto, producto de la utilización de una variedad de técnicas. De la misma manera, la tecnología no es lo que se opone a la naturaleza, sino aquello que fabrica, produce y define la idea de naturaleza. Las biotecnologías son la cumbre de las tecnologías de naturalización. La alimentación transgénica, los cosméticos, los psicofármacos, la cirugía estética o las técnicas de fertilidad ilustran bien su motto: “todos somos ciborgs”.
:: Anexo ::
Muy bueno, creo que ya no hay edición a la venta... Me está gustando mucho "Manifiesto Contrasexual" de Beatriz Preciado, muy provocador.